Cuando por fin se ha acabado las interminables primarias del Partido Demócrata, Obama todavía nos quiere hacerse de rogar no presentando a su compañero de ticket (como dirían los anglos), vamos el candidato a la vicepresidencia.
Después del ejemplo de dignidad y de democracia interna dado por Hillary Clinton que despidió su campaña a la candidatura demócrata con el grito del hasta entonces contrincante: -Yes, we can – lo que viene escuchándose cada día más en español: Sí, se puede.
Espero que la valía de esta mujer, que se reconoce así misma como feminista acompañe a la Casa Blanca a Barack Obama, en un ticket que haga borrar sin más tardar a la década ominosa Bush.
Ambos han representado una propuesta que ha vuelto a congraciarme, como socialdemócrata, con el Partido Demócrata: el seguro sanitario universal. Bienvenido sea este cambio de rumbo, no es chistoso; Harper y Obama en América del Norte y en Europa Merkel, Berlusconi y Sarkozy… a ver si al final la socialdemocracia se tendrá que hacer proatlantista.
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