domingo, 28 de noviembre de 2010

Entre el Estatut y la Independencia, CiU

Artur Mas, ha salido elegido como era previsible como President de la Generalitat. Se ha cumplido la primera alternancia total en la política catalana y CiU se ha consagrado como partido dominante en el Sistema de Partidos catalán. Para aquellos que pensaron que CiU estaba demasiado marcada por el carácter de Pujol o para aquellos otros que atisbaban el divorcio del matrimonio de conveniencia entre los soberanistas de Mas y los Democristianos de Durán, hoy han podido ver como triunfaba CiU de una manera renovada y unida.

Los ciudadanos de Catalunya estaban convocados a las urnas, tras el gran fracaso de la anterior legislatura, el Estatut. Es cierto que hay otras muchas razones en cada una de las papeletas, que no hay que olvidar el voto de oposición que origina toda crisis económica y que uno de los partidos ha decidido hacer mutis por el foro sobre esta cuestión, como el PP.

Los catalanes entonces tenían unas opciones muy claras. PSC (y en general el tripartito) representaban el timorato y fallido Estatut, del olor del cual ERC (10) no ha sabido apartarse. La otra parte, la independencia aquella de la que se empezó a hablar gracias a las consultas populares la representaba Solidaritat per la Independencia (4) de Joan Laporta. Tambíen existia una vía españolista, la de Ciudadanos (3). Y nos preguntaremos que hacía CiU en todo esto, CíU representaba a su vez ambas vías, ya que pacto aquel Estatut directamente con Zapatero aunque supo también coquetear a los soberanistas.

La victoria es indudablemente de esta vía intermedia y moderada como gusta en Catalunya. La derrota es para la vía del Estatut. Pero una nueva vía se ha inaugurado y está es la del independentismo más cortoplacista, que ya se intento con el PI, el Partido Independentista que fracasó hace años pero ahora ha conseguido un gran resultado, 4 escaños.

De los resultados trasluce que CiU no lo tendrá tan difícil para ganar las votaciones en el Parlament a tan sólo 6 escaños de la mayoría absoluta por lo que podrá gobernar solo. Eso sí, con tacto. Tan seguros estaban de ello, que se han arriesgado a seguir la noche electoral en el Hotel Majestic, sí, sí, el mismo que el de aquel pacto del 96 que tanto se lleva repitiendo en estos meses de campaña.

No hay comentarios: