domingo, 31 de octubre de 2010

El ocaso de las bolsitas de té

El martes siguiente al primer lunes del mes de noviembre huele siempre a elecciones en los Estados Unidos, más bien cada dos años huele a elecciones, estas pueden ser o Presidenciales o Parciales (mid-term) pero siempre traen aparejadas un montón de distintas elecciones, puesto que el Senado se renueva por tercios y además debemos acordarnos de los numerosos referendos que se asocian a cada elección.

Las elecciones de este martes traen grandes sorpresas, aunque parece existir una tendencia a que las cámaras, Senado y Casa de Representantes caigan de nuevo en control de los demócratas aunque la mayoría conseguida en 2006 parece debilitarse.

La gran novedad de la campaña ha sido la irrupción del Tea Party, un movimiento radical ultraconservador que en sus inicios abocaba por la disminución del presupuesto público y se inspiraba en el Motín del Té, una revuelta antifiscal de la Revolución Americana y cuyos miembros se hacen llamar bolsitas de té (Teabaggers, que significa también el acto sexual de lamer el escroto...). Este movimiento ha degenerado en un clamor racista y populista, con un discurso antielitista y anti establishment dentro del partido republicano, muy poco creíble sobre todo cuando se escuchaba a lideres republicanos como Sarah Pallin entonarlo y que bien recuerda el lema de la Liga Norte “Roma ladrona, la liga no perdona” entre otros clásicos del populismo.

Este movimiento extremista ha acabado desinflándose y ha provocado una división en el Viejo Gran Partido (como se conoce al partido republicano, GOP, Great Old Party) que les hará perder varios senadores y congresistas, puesto que los candidatos moderados fueron purgados en las primarías como ha ocurrido en Delaware, otras veces los republicanos moderados no se han dejado galvanizar y han decidido presentarse como independientes lo que ha hecho pensar hasta en una victoria demócrata en Alaska, un clásico feudo republicano.

Por otro lado, si las elecciones parecen castigar ligeramente al gobierno, hay que esperar muy buenas noticias en California. El Estado Dorado vuelve a la buena senda demócrata, parece que vuelve a su rol de bastión demócrata reeligiendo a su senadora demócrata y acabando con la nefasta gestión del Gobernador Schwarzenegger, el Terminator del presupuesto Californiano que ha dejado el paréntesis republicano en el estado granjeado de escándalos financieros. Pero como broche de oro, parece que se aprobará el referendo sobre la legalización de la Marihuana con fines recreacionales.

Hay muchas cosas por las que votar el 2 de noviembre si eres estadounidense y muchos temas a seguir de cerca para los que no lo somos. Las grandes protagonistas de esta bomba mediática del Tea Party en esta campaña, fueron Sarah Pallin que le ha cogido el gusto a dar la nota de humor negro a cada campaña, esta mujer parece que va a dar para largo pese a confundir África con un país o mirar a cámara diciendo que las victimas de incesto y violación deben tener a los hijos aunque estos salgan con malformaciones. Algo más divertida ha estado su aprendiz de bruja, la candidata a senadora por Delaware que ha perdido unas elecciones prácticamente ganadas por su campaña que ha causado la mofa en todos los EEUU y que os recomiendo encarecidamente.

jueves, 28 de octubre de 2010

Hasta simpre K, Hasta siempre Néstor

No soy muy partidario de los obituarios. Pero esta vez voy a hacer una pequeña excepción debido a los comentarios atroces que he escuchado sobre este gran político latinoamericano. A mí que me resbala un poco esta tendencia de que todos los muertos son santos y grandes hombres, hoy voy a romper una lanza por este gran hombre que recogió un país en la más absoluta de las miserias y acabó llevándolo a donde siempre le ha correspondido estar a la Argentina, al G-20 como potencia emergente.

Néstor Kirchner ha sido un político de talla que ha sabido plantar cara a la vergonzosa corriente ultraliberal de los 90 que vivía Argentina (y no sólo la Argentina sino también la maquinaria peronista) y que llevó la Argentina al desastre, a una situación que empobreció a la clase media hasta llevarla a la miseria y el hambre.

Kirchner se enfrentó también a los demonios del pasado, tuvo valentía y tesón para llevar a los militares golpistas y torturadores ante la justicia. Haciendo Archivo Nacional de la Memoria, la ominosa Escuela de Mecánica de la Armada donde a los defensores de la democracia les esperaba la tortura y el cinismo de los militares que habían colgado “Perded toda esperanza”.

Kirchner supo enderezar la economía de un país en bancarrota y una de las peores catástrofes monetarias como fue la del “Corralito”. También supo librar a la Argentina del pesado yugo de la deuda externa, la misma que perpetuaba los planes de estructuración que desestructuraban la economía y vendían al peor postor las compañías públicas durante la época Menem. Un dinero que pidió la dictadura militar para masacrar a su población y embarcarse en la quijotada de las Malvinas y que con tanto esfuerzo tuvo que devolverse como recordó amargamente en su discurso de asunción como Presidenta, Cristina Fernández, como debían priorizar el pago de la deuda a los presupuestos sociales y como esto le causaba unos conflictos ideológicos.


Kirchner ha sabido llevar una política internacional que ha devuelto a Argentina al mundo, y como muestra un botón, su último cargo como Secretario General de la nueva organización de integración regional UNASUR, pero no solo eso, sino que consiguió la entrada en el selecto grupo del G-20.

Cómo senador, una vez que dejó la presidencia en manos de una gran política de su partido, mano derecha durante una carrera política que habían construido juntos en momentos muy duros de la política Argentina le debo mi más sentido y personal hito, que fue su defensa a ultranza del matrimonio homosexual en el Senado donde la estrecha mayoría peronista no se podía permitir disensiones internas, utilizando su merecido prestigio político para sacar la votación adelante.

Mi más sentido pésame a su viuda víctima del machismo y la calumnia, una mujer de estado peronista que ha sabido continuar y engrandecer el legado de su predecesor en el cargo. Una mujer que como mujer ha sido vilipendiada por entrar en ese mundo de hombres y además de cometer el gran pecado de casarse con su compañero de carrera política con el que juntos consiguieron llegar a la cumbre desde sus primeros cargos, el de Cristina como diputada nacional en el 89 y el de Néstor como como alcalde primero y después en el 93, como Gobernador. La Argentina está de luto y la Historia le recordará.